miércoles, 6 de agosto de 2014

el agua



el agua, fuente de vida




El agua es esencial para la vida. Ningún ser vivo sobre la Tierra puede sobrevivir sin agua. El agua resulta indispensable para la salud y el bienestar humanos así como para la preservación del medio ambiente. A pesar de ello, cuatro de cada diez personas en el mundo carecen de acceso a una simple letrina y casi dos de cada diez no tienen acceso a una fuente segura de agua potable. Cada año, millones de personas, la mayoría niños, mueren por enfermedades relacionadas con un abastecimiento de agua, un saneamiento y una higiene inadecuados. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, cada día mueren alrededor de 3.900 niños a causa del agua sucia y de la falta de higiene; las enfermedades transmitidas a través del agua o de los excrementos humanos constituyen la segunda causa de muerte infantil en el mundo después de las enfermedades respiratorias. Tanto la escasez como la baja calidad del agua y un saneamiento deficiente afectan negativamente a la seguridad de los alimentos, las opciones de sustento y las oportunidades de educación, sobre todo las de las familias más pobres del planeta. Los desastres naturales relacionados con el agua como inundaciones, tormentas tropicales, tienen una enorme repercusión en la vida y el sufrimiento humanos. También demasiado a menudo la sequía golpea a los países más pobres, agravando las situaciones de hambre y malnutrición.

 Más allá de cubrir las necesidades básicas del ser humano, el abastecimiento de agua y los  servicios de saneamiento, así como el uso que hacemos de los recursos hídricos, son  factores determinantes para un desarrollo sostenible. En algunas partes del mundo, el agua  constituye la principal fuente de energía, mientras que en otras se desaprovecha casi  totalmente su potencial energético. También resulta indispensable para la agricultura y forma  parte de numerosos procesos industriales y, en muchos países, supone el principal medio de  transporte. Gracias a un mejor entendimiento del conocimiento científico, la comunidad  internacional ha empezado a apreciar en mayor medida los beneficios derivados de los  ecosistemas acuáticos, por ejemplo, en el control de las inundaciones, la protección contra  las tormentas.


 El agua, al mismo tiempo que constituye el líquido más abundante en la Tierra, representa el  recurso natural más importante y la base de toda forma de vida.
 El agua puede ser considerada como un recurso renovable cuando se controla  cuidadosamente su uso, tratamiento, liberación, circulación. De lo contrario es un recurso no  renovable en una localidad determinada.
 No es usual encontrar el agua pura en forma natural, aunque en el laboratorio puede llegar a  obtenerse o separarse en sus elementos constituyentes, que son el hidrógeno (H) y el oxígeno  (O). Cada molécula de agua está formada por un átomo de oxígeno y dos de hidrógeno,  unidos fuertemente en la forma H-O-H.

En nuestro planeta las aguas ocupan una alta proporción en relación con las tierras  emergidas, y se presentan en diferentes formas:
  • mares y océanos, que contienen una alta concentración de sales y que llegan a cubrir un 71% de la superficie terrestre;
  • aguas superficiales, que comprenden ríos, lagunas y lagos;
  • aguas del subsuelo, también llamadas aguas subterráneas, por fluir por debajo de la superficie terrestre.
 Aproximadamente 97% del agua del planeta es agua salina, en mares y océanos; apenas 3%  del agua total es agua dulce (no salina) y de esa cantidad un poco más de dos terceras  partes se encuentra congelada en los glaciares y casquetes helados en los polos y altas  montañas.



 Desde los mares, ríos, lagos, e incluso desde los seres vivos, se evapora agua  constantemente hacia la atmósfera, hasta que llega un momento en que esa agua se  precipita de nuevo hacia el suelo. De esta agua que cae, una parte se evapora, otra se  escurre por la superficie del terreno hasta los ríos, lagos, lagunas y océanos, y el resto se  infiltra en las capas de la tierra, y fluye también subterránea mente hacia ríos, lagos y  océanos. 

 Esta agua subterránea es la que utilizan los vegetales, los cuales la devuelven después de  nuevo a la atmósfera.
 Como observamos, al volver el agua a la atmósfera se completa un ciclo, que se  denomina ciclo hidrológico o del agua.
 De esta manera la naturaleza garantiza que el agua no se pierda y pueda volver siempre a  ser utilizada por los seres vivos.
 Importancia del agua para la vida. La vida en la Tierra ha dependido siempre del agua. Las  investigaciones han revelado que la vida se originó en el agua, y que los grupos zoológicos  que han evolucionado hacia una existencia terrestre, siguen manteniendo dentro de ellos su  propio medio acuático, encerrado, y protegido contra la evaporación excesiva.

 El agua constituye más del 80% del cuerpo de la mayoría de los organismos, e interviene en  la mayor parte de los procesos metabólicos que se realizan en los seres vivos. Desempeña  de forma especial un importante papel en la fotosíntesis de las plantas y, además, sirve de  hábitat a una gran parte de los organismos.

 Dada la importancia del agua para la vida de todos los seres vivos, y debido al aumento de  las necesidades de ella por el continuo desarrollo de la humanidad, el hombre está en la  obligación de proteger este recursos y evitar toda influencia nociva sobre las fuentes del  
 preciado líquido.



 El agua dulce es un recurso renovable pero la disponibilidad de agua fresca limpia, no  contaminada, está disminuyendo de manera constante. En muchas partes del mundo, la  demanda de agua ya excede el abastecimiento; a medida que aumenta la población mundial,  así también aumenta la demanda de agua limpia.

 Es una práctica acostumbrada el ubicar industrias y asentamientos humanos a la orilla de las  corrientes de agua, para utilizar dicho líquido y, al mismo tiempo, verter los residuos del  proceso industrial y de la actividad humana. 

Esto trae como consecuencia la contaminación  de las fuentes de agua y, por consiguiente, la pérdida de grandes volúmenes de este recurso.

Actualmente, muchos países que se preocupan por la conservación, prohíben esta práctica y  exigen el tratamiento de los residuos hasta llevarlos a medidas admisibles para la salud  humana.Es un deber de todos cuidar nuestros recursos hidrológicos, así como crear la conciencia de  que el agua es uno de los recursos más preciados de la naturaleza, por el papel que  desempeña en la vida de todos los seres vivos.














cuídame hoy para tenerme mañana

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